Gran Hermano llega a las etapas finales. En la decimosexta gala de nominación, cuatro de los seis hermanitos quedaron en placa y son candidatos a irse de la casa más famosa del país.
Como se había estipulado, antes de nominar, los participantes recibieron en vivo las cartas de nominación. El orden de entrada al confesionario se realizó mediante un sorteo con bolillero.
Gisele obtuvo la carta de la yapa; Solange sacó la carta blanca; Cristian eligió la de la salvación y Martín P., Emiliano y Martín A. también sacaron cartas blancas.
Cuando estaba todo listo para comenzar el proceso de nominación, Martín A. volvió al confesionario y le hizo la fulminante a Solange. Luego, el resto de los hermanitos fue llamado por Gran Hermano para nominar.
Fue así como, además de Solange, quedaron en placa: Gisele con 3 votos, Martín P. con 2 y Cristian y Emiliano, que se autonominaron. Luego, al momento de hacer uso de su carta, Cristian U. decidió salvar a Emiliano.
De esta manera, cumplió con la promesa que le había hecho al cordobés: "Si yo saco la salvación y estás vos, Solange y alguien más en placa, te saco a vos".
En los primeros sondeos en foros y redes sociales, la tucumana cosechaba entre el 40 y 50% de intención de voto, y sólo Chizo se acercaba a ese indeseado primer lugar: sumaba entre un 30 y 40%. Pero esa tendencia comenzó a revertirse rápidamente. Pepa y Urrizaga no corren peligro.
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